Alaphilippe ganó la etapa y se puso a llorar
En lágrimas luego de cruzar la línea de meta en el emblemático Paseo de los Ingleses de Niza, Alaphilippe fue el más ambicioso al final de esta primera etapa de media montaña.
Julian Alaphilippe ganó la segunda etapa del Tour de Francia en un día mucho más tranquilo respecto a la primera fracción. El francés pudo escaparse en el momento justo y luchó junto con Marc Hirschi y Adam Yates para la victoria. En los últimos metros el del Quick embaló, cruzó la meta y se puso la camiseta amarilla de nuevo líder de la ‘Grande Boucle’.
La jornada se corrió también en Niza con 186 kilómetros de recorrido y tres puertos de montaña que significaron un gran desgaste para el pelotón y evitaron una llegada masiva para sprinters. Dos premios de primera categoría al kilómetro 63 y 99,5 fueron los primeros obstáculos importantes para el pelotón. Tras un descenso significativo, se ascendió al puerto de Col dEze de segunda, para luego ir por un último repecho de sprint especial y arribar a la meta.
A nivel general hubo un día más tranquilo respecto a la primera etapa. Hubo un grupo de escapados importantes que se lanzaron al inicio de la carrera para intentar buscar una victoria. Dentro de ellos se destacó Peter Sagan. No obstante, la conexión ocurrió tras el penúltimo descenso del segundo premio de montaña.
El equipo del Jumbo Visma, encabezado por su líder Primoz Roglic, intentó ascelerar el grupo e imponer el ritmo. A ellos les seguía el Ineos de Egan Bernal y Groupama-FDJ de Thibaut Pinot.
A 30 kilómetros del final el susto para Colombia lo dio Daniel Felipe Martínez, quien se cayó en una curva, pero pudo conectar con el grupo nuevamente gracias al gran trabajo de su equipo.
La velocidad del pelotón fue cada vez mayor y el Quick Step lanzó a 10 kilómetros del final a su corredor estrella Julian Alaphilippe, quien empezó la lucha por la victoria y vestirse de amarillo.
Dos ciclistas siguieron al francés: el británico Adam Yates y el suizo Marc Hirschi. Los tres, junto con Alaphilippe, comandaron la lucha para desprenderse por completo del grupo grande e intentar luchar por la fracción. El francés logró sacarle una ventaja importante a los otros dos ciclistas y consiguió un triunfo importante y así volver a vestirse de amarillo.
Entretanto, la fracción del día de mañana, tercera del Tour de Francia, tendrá 198 kilómetros entre Niza y Sisteron con cuatro puertos de montaña: tres de tercera y uno de cuarta en la mitad de la carrera con llegada plana hecha para los sprinters.