Diario del Cesar
Defiende la región

¡El adiós a dos primas!     

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POR:

CRISTIAN

BOHÓRQUEZ

Sentimientos de dolor y nostalgia hay en el corregimiento de Guacoche, jurisdicción de Valledupar. Dos reconocidas habitantes de esa región fueron sepultadas ayer, luego de que sus vidas se apagaran en un trágico accidente de tránsito registrado la mañana del martes cuando iban rumbo a su lugar de trabajo.

En Guacoche lloran a Mónica Cujia, y a su prima Johana Romero Castilla, las cuales perecieron cuando se movilizaban en una motocicleta de placa VJA-11C. Ambas iban para Corpocesar a donde laboraban como aseadoras, pero la muerte les ganó la carrera y colisionaron de frente con una camioneta Toyota Hilux de placa VA-024 cuando fueron pasar otro vehículo que se encontraba estacionado en la vía; la intención no fue suficiente, el vehículo de dos ruedas no pudo detenerse a tiempo para evitar dicha tragedia.

Cujia y Romero Castilla inicialmente quedaron mal heridas, allegados las trasladaron a la clínica Erasmo de la capital del Cesar donde primeramente falleció Mónica Cujia y en pocos minutos, cerró para siempre sus ojos Johana Romero Castilla.

Ellas no solamente compartían el espacio de trabajo, también lo hacían en Guacoche, pues allí vivían con sus familias con quienes pasaban gran parte de su tiempo.

Cuenta la comunidad que las nativas que en ese sector vivieron muchos momentos buenos las hoy fallecidas, se acompañaban en diversas circunstancias de la vida, pero lo que jamás pensaron es que el martes se separarían en un viaje sin regreso.

“Hoy nos duele la partida de estas dos mujeres pujantes, guerreras, y llenas de mucho valor y servicio. La despedimos recordándolas como unas mujeres del pueblo, de sus familias y de la gente”, dijo un morador del corregimiento de Guacoche.

Al respecto, el periodista Albert Castilla Romero, primo de las fallecidas, aseveró a DIARIO DEL CESAR que: “El pueblo está consternado por lo sucedido, todos están entristecidos con la muerte de estas dos amigas del pueblo, ellas eran primas pero no tenían relación los apellidos, pero si eran primas. Decir que el pueblo se quedó en casa, es mentiras, la gente fue al sepelio porque querían mucho a Mónica Cujia y a Johana Romero Castilla”.

Hoy el corregimiento de Guacoche llora, pero a la vez suplica para que este tipo de hechos no se vuelvan a presentar y no tener que volver al llanto como en la actualidad lo está viviendo.