La ministra del Interior, Alicia Arango, se pronunció sobre las versiones que han surgido en los últimos días de presuntas irregularidades electorales que se habrían cometido para favorecer al presidente Iván Duque.
Arango, quien fue la mano derecha del entonces candidato, aseguró que la campaña política del mandatario fue totalmente transparente, que no se solicitaron dineros ilegales y tampoco se compraron votos.
“Nosotros no tenemos por qué andar pidiendo plata por debajo de la mesa a nadie, eso no se parece ni al presidente Uribe ni al presidente Duque, nunca lo hemos hecho y nunca lo vamos a hacer”, señaló la funcionaria.
Dijo además: “Nos ratificamos en que esta fue una campaña transparente y este es un Gobierno transparente, y estamos seguros de nuestras actuaciones. Como dice el presidente Duque: ‘Me arrimo a la candela porque no tengo rabo de paja’ y así es”.
La ministra del Interior dijo que los votos que consiguió el hoy mandatario son producto de la popularidad que tuvo durante todo el proceso electoral.
“Nosotros en el Gobierno decimos que fue una campaña completamente transparente, que eso fue una campaña hecha con mucho rigor. Comenzamos desde el -20 y poquito a poco fuimos aumentando la popularidad e imagen del presidente Duque y de esa manera nosotros hicimos la campaña, con trabajo y fuerza”, añadió.
Habló de las fotos entre el ganadero ‘Ñeñe’ Hernández e Iván Duque, diciendo que no pueden considerarse como prueba de una relación cercana.
“Las personas se toman fotos con todo el mundo, y uno cómo hace para decirle a una persona que con él no me tomo fotos, uno no tiene un radar para saber quién es narcotraficante y quién no. A esas reuniones va mucha gente y lo importante es la relación real que tiene con el candidato, que es ninguna”, manifestó.
En la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes ya fue radicada una denuncia formal en contra del presidente Duque por la denominada ‘Ñeñepolítica’
El caso de la Ñeñepolítica, que está relacionado con unas interceptaciones que se le hicieron a un ganadero conocido como Ñeñe Hernández, que luego fue vinculado a narcotráfico, sigue dando de qué hablar en el país.