De El Bosque a La Tramacúa, Jaime Saade cambia de prisión
TRAS ESCÁNDALO DE SEGURIDAD
Luego de protagonizar una polémica situación durante una cita médica en Barranquilla, el condenado por el asesinato de Nancy Mestre, Jaime Saade, fue trasladado desde la Penitenciaría El Bosque a la cárcel de máxima seguridad La Tramacúa en Valledupar.
Según fuentes cercanas al caso, Saade ingresó a una consulta médica en el norte de Barranquilla sin el acompañamiento adecuado por parte del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec). A pesar de múltiples llamados por parte del personal del centro médico, el interno ingresó al consultorio sin custodia visible, lo que encendió las alarmas del sistema penitenciario. Ante la falta de control, el director del centro de reclusión fue notificado y acudió personalmente al lugar.
Este hecho generó cuestionamientos sobre la vigilancia y el trato especial que habría recibido Saade, quien fue extraditado a Colombia el pasado 11 de abril de 2024, luego de permanecer prófugo durante casi tres décadas tras el crimen que conmocionó a la ciudad de Barranquilla.
Al respecto, Raúl Romero, abogado de la familia de Nancy Mestre, se pronunció sobre el traslado: “Nos sorprendió la decisión, pero esperamos que el señor Saade continúe con su proceso de resocialización. Sabemos que se trata de un procedimiento interno del Inpec”.
UNA TRAGEDIA QUE MARCÓ AL PAÍS
El asesinato de Nancy Mestre ocurrió el 1 de enero de 1994, luego de que la joven recibiera permiso para seguir celebrando el Año Nuevo con su novio, Jaime Saade. Horas después, su padre inició una búsqueda desesperada al notar que no había regresado a casa. El rastro lo llevó hasta la residencia de la familia Saade, donde encontró indicios de una escena del crimen alterada y la noticia de que Nancy había sido llevada al hospital.
La versión entregada por los familiares de Saade señalaba un presunto intento de suicidio por parte de la joven. Sin embargo, la investigación reveló lo contrario: Nancy murió de un disparo en la sien derecha, pero era diestra, lo que hacía improbable la hipótesis del suicidio. Además, se encontraron restos de pólvora en su mano izquierda.
Dos años más tarde, en 1996, un tribunal colombiano lo condenó a 27 años de prisión por asesinato y acceso carnal violento. No obstante, Saade había huido del país y adoptado una nueva identidad en Brasil, donde vivió por años como Henrique dos Santos Abdala.
Gracias a la persistencia del padre de Nancy, Martín Mestre, y su labor investigativa, fue posible dar con su paradero. La Interpol y la Policía Federal de Brasil lograron capturarlo, tras descubrir que usaba documentos falsos. En territorio brasileño, fue procesado por suplantación de identidad mientras avanzaban las gestiones diplomáticas para su extradición a Colombia.
Una vez en Colombia, Saade fue recluido inicialmente en la cárcel El Bosque. Su condena fue posteriormente ajustada a 24 años, con descuento de los dos años que permaneció privado de la libertad en Brasil. El Gobierno colombiano solicitó además que no se le tuviera en cuenta el delito de acceso carnal violento, reduciendo aún más su pena.