Benedetti se cogió la Dirección de Bomberos y sacó a Lourdes Peña
Tras fuertes tensiones con el Ministro del Interior por un polémico proceso de contratación, la abogada y capitana bomberil Lourdes Peña fue declarada insubsistente por decreto expedido por Benedetti. El capitán Fredy Alvarado fue designado como reemplazo temporal.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, consumó ayer su amenaza y destituyó a la capitana y abogada Lourdes del Socorro Peña de su posición como directora general de la Dirección Nacional de Bomberos. Por intermedio del Decreto 0428, el titular de la cartera, con el aval del presidente de la República, Gustavo Petro, decidió declarar insubsistente a la funcionaria, que se negaba a dejar el cargo en mención. ´Benedetti lo que necesitaba era el cargo. Le tiene los ojos puestos a un presupuesto de inversión superior a los 38 mil millones de pesos´, dijo la señora Peña del Valle.
En el documento el ministro Benedetti designó al capitán Fredy Alonso Alvarado Navarro como director encargado. De esta manera, y luego de una intensa semana, en la que se registró un fuerte enfrentamiento mediático entre Peña y las autoridades competentes, se terminó confirmando una abrupta salida que ha captado el foco de atención mediática.
La tensión institucional entre la Dirección Nacional de Bomberos y el Ministerio del Interior terminó ayer finalmente en la salida oficial de la abogada Lourdes del Socorro Peña, quien fue declarada insubsistente por decisión del presidente Gustavo Petro. Esta determinación, contemplada en el decreto 0428, también fue firmada por el actual ministro del Interior, Armando Benedetti, y designa como director encargado al capitán Fredy Alvarado. Con esta determinación se marca un nuevo capítulo en la relación entre ambas entidades, relación que desde hacía semanas mostraba signos evidentes de deterioro debido a crecientes diferencias internas y cuestionamientos sobre la gestión administrativa de la ahora exfuncionaria.
LOS DESENCUENTROS
Peña del Valle y Benedetti tuvieron una serie de desencuentros y allí como eje central un proceso de contratación por cerca de 38.000 millones de pesos. Según fuentes cercanas al Ministerio del Interior, la directora impulsó dicho proceso precisamente en el momento en que se le solicitaban explicaciones detalladas sobre su desempeño en el manejo de los recursos públicos asignados a la Dirección Nacional de Bomberos. Para el ministro Benedetti, esta coincidencia temporal resultó llamativa y generó múltiples interrogantes, pues consideró que la contratación fue promovida de manera apresurada en medio de cuestionamientos y dudas internas sobre la transparencia de la gestión. Esto, según indicó públicamente, aumentó la desconfianza respecto a la administración de la funcionaria.
SE DEFIENDE
Aunque la abogada Lourdes Peña del Valle afirmó mediante un comunicado oficial que no había recibido ninguna solicitud formal de renuncia y que, por tanto, seguía ejerciendo legítimamente su cargo, desde el Ministerio del Interior se reiteró que sí se le había pedido la dimisión de manera protocolaria. Adicionalmente, se le había citado a una reunión clave para presentar su informe de gestión, un encuentro institucional que consideraban esencial para evaluar el rumbo de la entidad. Sin embargo, la no asistencia de Peña fue interpretada como un gesto de desinterés frente al diálogo y a la rendición de cuentas, lo cual, según funcionarios del ministerio, se convirtió en un punto crítico para tomar la decisión de retirarla del cargo.
EL AFÁN DE BENEDETTI
El ministro Armando Benedetti, al referirse al caso, fue enfático en señalar que la exdirectora no actuó con la transparencia esperada durante los últimos días de su administración. “Cuando se le pidieron cuentas, ordenó avanzar con un contrato por más de 30.000 millones. Eso, como mínimo, genera dudas”, expresó. No obstante, Benedetti también reconoció que, conforme a las normas vigentes, su despacho no tenía la autoridad directa para declarar insubsistente a la directora, sino que esa facultad exclusiva correspondía al presidente de la República. Fue así como se dio la firma del decreto presidencial que oficializó su salida.
EL DECRETO
El decreto expedido por el Gobierno Nacional establece que el cargo de director nacional de Bomberos no está sujeto a procesos de concurso público, ya que se trata de una posición de libre nombramiento y remoción. Esto le otorga al presidente la capacidad de efectuar cambios discrecionales en la dirección de la entidad. En ese contexto, la desvinculación de Peña fue legalmente viable y se ejecutó sin que mediara un proceso sancionatorio previo. A su vez, se nombró de forma transitoria como director encargado al capitán Fredy Alvarado, quien deberá liderar la entidad mientras se toma una decisión definitiva sobre quién asumirá el cargo de manera oficial, garantizando la continuidad de los procesos operativos, estratégicos y administrativos.
DENUNCIÓ PERSECUCIÓN POLÍTICA
La exdirectora Lourdes Peña del Valle durante sus pronunciamientos públicos, defendió con vehemencia su paso por la Dirección Nacional de Bomberos, calificando su gestión como estrictamente técnica, transparente y orientada al fortalecimiento institucional. Según explicó, las decisiones adoptadas en materia contractual no fueron improvisadas, sino que formaban parte de planes operativos que venían siendo estructurados con antelación. Además, manifestó que las críticas hacia su administración no tenían sustento técnico y las enmarcó dentro de lo que calificó como una persecución política en su contra, orquestada desde altos niveles del poder ejecutivo.
“Soy la primera mujer nombrada como directora nacional de bomberos de Colombia, y agradezco al presidente por haberme dado esta oportunidad de servir a mi país”, señaló, haciendo referencia a su nombramiento, realizado en enero de 2024 por el entonces ministro del Interior, Luis Fernando Velasco. También recalcó su experiencia previa como comandante del Cuerpo de Bomberos del municipio de Ciénaga, Magdalena, de donde es oriunda, y recordó su trabajo incansable en campañas de prevención de incendios forestales, la profesionalización del servicio bomberil y el fortalecimiento del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo.
EL ENCARGO
El documento también dispone que el encargo otorgado a Alvarado Navarro será temporal, “mientras se nombra y posesiona al titular del cargo”. No obstante, este nombramiento no interrumpirá las funciones que Alvarado desempeñaba previamente dentro del Grupo Regional Servicio de Extinción de Incendios, de la Dirección Regional Occidente de la Unidad Administrativa Especial de Aeronáutica Civil.
El decreto también establece lineamientos respecto a la comunicación interna del cambio. El ministerio ordenó que, a través de la Subdirección de Gestión Humana, se comunique el contenido de este Decreto a la Dirección Nacional de Bomberos y a tanto a Peña y Alvarado Navarro, con lo que se formalizó del proceso tanto para la funcionaria saliente como para el nuevo director encargado.