Diario del Cesar
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Persisten las divisiones internas tras posesión de Zarwawiko Torres

CONFLICTO EN EL RESGUARDO ARHUACO

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El conflicto interno en la etnia arhuaca, que ha persistido desde la elección de Zarwawiko Torres como cabildo gobernador en 2020, continúa generando tensiones dentro de la comunidad y frente a diversas entidades del Estado. La controversia se centra en la legitimidad de su elección y las profundas divisiones que esta ha ocasionado entre los líderes y autoridades tradicionales del Resguardo Arhuaco.

La elección de Zarwawiko Torres en agosto de 2020 fue cuestionada por líderes indígenas que alegan irregularidades en el proceso.

Aseguran que la votación no contó con la participación de la totalidad de los 60 asentamientos arhuacos de Nabusimake, obteniendo el respaldo de solo 19. Esto ha dado lugar a un conflicto que han informado a la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría General de la Nación, la Alcaldía de Valledupar y el Ministerio del Interior.

En 2021, la Corte Constitucional suspendió temporalmente a Torres mientras se investigaban las presuntas irregularidades en su elección y otros posibles delitos cometidos en el seno de la comunidad. Sin embargo, las disputas internas han continuado sin resolverse de manera definitiva.

UNA OPORTUNIDAD FALLIDA

En un esfuerzo por resolver el conflicto, las partes acordaron un encuentro en el centro de Simonorwa los días 9 y 10 de enero de 2025. Este acercamiento, fundamentado en un acuerdo previo firmado en Valledupar el 27 de diciembre de 2024, buscaba generar un espacio para el diálogo y la reconciliación.

No obstante, el encuentro terminó profundizando las divisiones. Según representantes opositores a Torres, la reunión estuvo marcada por desinformación, desconfianza y animadversión entre las partes. Además, denunciaron que no se respetaron los principios de la Ley de Origen del Pueblo Arhuaco (Kunsamu).

El último día del encuentro, se anunció la elección de tres nuevos gobernadores y representantes legales de los resguardos Arhuaco de la Sierra, Magdalena, Guajira y Businchama, hecho que ha sido calificado como ilegítimo por los opositores.

En una petición enviada al Ministerio del Interior, la Procuraduría y las alcaldías de Valledupar y Pueblo Bello, los opositores de Torres solicitaron que no se legitime esta elección ni las decisiones tomadas durante el encuentro en Simonorwa. Argumentaron que el proceso careció de transparencia y no fue notificado a todas las partes.

A pesar de la polémica, Zarwawiko Torres fue recientemente posesionado como cabildo gobernador en la Alcaldía de Valledupar. Según indicó, se encuentran adelantando los trámites necesarios para obtener la certificación del Ministerio del Interior, lo que podría afianzar su liderazgo a nivel institucional, aunque el rechazo interno persista.

La posesión se realizó en cumplimiento del acuerdo alcanzado durante la reunión del pasado 27 de diciembre y en atención a la Sentencia SU 419 de 2024 de la Corte Constitucional, que establece directrices relacionadas con el ejercicio de la autoridad indígena.

El futuro del Resguardo Arhuaco sigue siendo incierto. Las divisiones internas reflejan una lucha más amplia entre el respeto a las tradiciones ancestrales y las dinámicas legales y políticas contemporáneas.

Así las cosas, la comunidad y las autoridades enfrentan el desafío de encontrar una solución que garantice la unidad y el respeto por los derechos y valores del pueblo arhuaco asentado en la Sierra Nevada de Santa Marta.