La ministra de Justicia, Ángela Maria Buitrago, planteó hoy la posibilidad de que el director de la cárcel La Picota, Jaider Ospina, y su línea de mando sean relevados de sus funciones, tras el asesinato de Francisco Luis Correa, principal testigo del caso Pecci, al interior de ese centro penitenciario.
“Esto no solamente significa reevaluar la presencia de este director, sino de todo el cuadro de mando en la cárcel La Picota. Este hecho no es por solo una persona. Hay que hacer investigación al pabellonero, a quien estaba al frente del patio, etcétera”, argumentó Buitrago.
En ese contexto, la Ministra explicó que la teoría que manejan sobre el asesinato es un riña entre Correa y otro interno, en medio de una ingesta de licor dentro de la celda.
“Sobre el lamentable asesinato de esta persona, tenemos información de que se realizó alguna manifestación que no es agradable para el agresor, y este lamentablemente posee también un elemento prohibido dentro del sistema carcelario y arremete contra Francisco Correa”, precisó.
Correa fue hallado muerto el 3 de enero en su celda. Los hechos se reportaron pasadas las 12:05 am, cuando uno de los dragoneantes, luego de que se escucharon gritos, corrió a ver qué había ocurrido y al llegar a la celda 25 lo encontró tendido en el suelo y rodeado de sangre. Por esos hechos ya hay una persona capturada.
Ante lo ocurrido el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) ordenó reforzar las medidas de seguridad de Margareth Chacón, condenada a 35 años por su participación en el homicidio del fiscal paraguayo.
Correa, habría planeado el crimen de Pecci, de manera que era considerado el «cerebro» del crimen y «testigo clave» de la Fiscalía, con la que había pactado un acuerdo de colaboración.
Según la investigación, Chacón asistió a, por lo menos, cuatro reuniones entre el 5 y 8 de mayo de 2022 en Medellín y Cartagena, en las que se definieron detalles de logística y financiamiento del asesinato.
Asimismo, se acreditó que Chacón se trasladó a Cartagena en una camioneta de su propiedad, junto a los hermanos Ramón Emilio y Andrés Felipe Pérez Hoyos, quienes aceptaron hacer parte del entramado criminal y ya fueron condenados.
Los ecos del crimen de Correa llegaron a Asunción, desde donde la familia de Pecci reclamó acciones concretas de la justicia colombiana. Las peticiones hechas por la viuda del fiscal, la periodista Claudia Aguilera, lograron que sus abogados y la Fiscalía se reunieran en la víspera para dialogar sobre los avances de la investigación y la preocupación por el asesinato del testigo clave.
“En el encuentro virtual, realizado por solicitud de la viuda del fiscal de la Unidad de Lucha contra el Crimen Organizado del Ministerio Público del Paraguay, se ratificó la confianza de los apoderados de las víctimas en la justicia colombiana y el compromiso de la Fiscalía General de la Nación en continuar la investigación hasta hallar y judicializar a todos los responsables del crimen”, explicó el ente investigador.
/Colprensa