Diario del Cesar
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Aguachica llora a su alcalde Víctor Roqueme Quiñonez

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Dolor, tristeza y consternación, es lo que vive en estos momentos el municipio de Aguachica, Cesar, por la inesperada muerte del alcalde Víctor Julio Roqueme Quiñonez, de 26 años, a causa de complicaciones de salud producto de una enfermedad de base.

El deceso se produjo la tarde del martes, en el Hospital Internacional de Colombia, ubicado en Piedecuesta, Norte de Santander. Según el informe médico, el mandatario local sufrió afectaciones como consecuencias de un diagnóstico hemato-oncológico como leucemia.

De igual manera indicaron que realizaron todos los esfuerzos desde el equipo médico-asistencial para mantenerlo con vida, sin embargo, los esfuerzos fueron en vano.

El pueblo se volcó a las calles a despedir a su mandatario, un joven que se metió en el corazón de pueblo que hoy lo llora con profundo dolor.

BATALLA CONTRA EL CÁNCER

El joven venía padeciendo problemas de salud desde antes de la campaña política, siendo visto por última vez en público el pasado 16 de agosto en las fiestas por los 276 años de fundación del municipio de Aguachica. Compartió con los asistentes, cantó el cumpleaños a la ciudad, saludaba y se tomó fotografías con todos.

Al siguiente día sufrió una descompensación que necesitó el traslado al centro asistencial y luego a Bucaramanga, donde adelantaba su tratamiento. Se conoció, por medio de algunos allegados, que Víctor Julio durante sus últimas horas de vida, sufrió tres infartos siendo reanimado, pero el último acabó con su vida de manera fulminante.

Presuntamente, la leucemia había sido diagnosticada pocos antes de la campaña política que lo llevó a la victoria durante las elecciones de octubre de 2023. Aunque se mostraba vigoroso y lleno de vida, Víctor Julio se fue descompensando sin poder ganar la batalla a la enfermedad que le tocó enfrentar durante los últimos meses.

TRASLADADO A CÚCUTA, SU TIERRA NATAL

Sus restos fueron recibidos a las 11:20 de la mañana de ayer por autoridades y pobladores en el aeropuerto Hacaritama de Aguachica, luego fueron trasladados, a bordo del camión del Cuerpo de Bomberos,  hasta el Parque San Roque donde se realizaron los actos fúnebres mientras el cuerpo permaneció en Cámara Ardiente hasta las 4:00 de la tarde.

El alcalde más joven del Cesar, a quien catalogaban como un hombre humanitario y servicial, será sepultado en su tierra natal, Cúcuta, hasta donde fue llevado por voluntad de sus padres y familiares, que le darán su último adiós la mañana de este jueves.

Diferentes mandatarios municipales y departamentales, personajes políticos y dependencias públicas, han mostrado su pesar por esta inesperada noticia que tiene sumergida en el dolor a la población aguachiquense.

En el parque San Roque se llevaron a cabo los actos fúnebres hasta la tarde de ayer. Los restos del mandatario municipal serán sepultados en su natal Cúcuta.

“TU LUCHA SEGUIRÁ HIJO…”

Con valentía, en medio del dolor, su padre Víctor Roqueme, escribió en su red social de Facebook un conmovedor mensaje en el que expresa el amor infinito y orgullo que sentía por su hijo, a quien despide con profunda tristeza.

“Gracias Dios mío, infinitas gracias, solo me queda darte por la dicha de haberme permitido ser el papá de un ser tan maravilloso como lo fue mi hijo Junior y compartir estos 27 años junto a él. Me consuela el alma saber que tu sonrisa siempre quedará en cada uno de nosotros, nos enseñaste tantas cosas hijo, tú nobleza, generosidad, bondad, alegría, tus ganas de salir adelante, de luchar siempre, en especial ser tan temeroso de Dios.

Hoy queda en la memoria de cada uno esa fuerza que te llevó a sembrar un legado enorme de berraquera, templanza, nobleza y humildad, nunca te rendiste, siempre fuiste feliz. Tu lucha seguirá hijo y tú serás la guía desde el cielo junto a nuestro padre celestial.

 

Su padre, Víctor Roqueme, despidió a su hijo con un emotivo mensaje en el asegura que el legado de su ‘campeón’, seguirá presente en su territorio.

Quiero agradecer a todas las personas que han mostrado su generosidad en este momento tan difícil para mí y toda mi familia. Gracias pueblo de Aguachica se que hoy lloraran a mi hijo porque en su esencia se robó un pedacito de corazón de cada uno de ustedes. Solo pido que Oremos juntos y demos gracias a Dios siempre. TE AMO y te amaré eternamente. Descansa en paz hijo de mi alma. Mi hijo es De Dios y a Dios ha de volver. Me lo prestaste 27 años padre amado y hoy lo tienes junto a ti, Gracias mi buen Dios”, expresó.

La Asociación Colombiana de Ciudades Intermedias, Asointermedias, expresó “Con profundo dolor lamentamos el fallecimiento del señor Alcalde de Aguachica, Víctor Julio Roqueme Q. Hoy nos unimos al duelo de su familia, amigos y toda la comunidad aguachiquense, quienes pierden a un líder comprometido con el desarrollo de su municipio. Su legado y dedicación por el bienestar de su gente quedarán siempre en nuestra memoria.

En estos momentos de tristeza, enviamos nuestras más sentidas condolencias y solidaridad. Que su ejemplo de trabajo y servicio siga inspirando a las generaciones venideras”.

El Partido Conservador también se pronunció en redes sociales: “lamentamos profundamente el fallecimiento de nuestro alcalde en el municipio de Aguachica Víctor Romeque, quien durante varios meses luchó contra un cáncer que padecía. Enviamos nuestras condolencias a su familia, amigos y al conservatismo de Aguachica. Descanse en paz”.

El alcalde de Valledupar, Ernesto Orozco, manifestó por su parte: “Lamento profundamente la muerte del alcalde de Aguachica @VictorRoqueme

Queda con nosotros su juventud llena de logros y su entusiasmo a una vida de servicio. Un abrazo solidario a su familia, amigos, equipo de gobierno y al pueblo de Aguachica”.

Víctor Julio Roqueme Quiñonez era un joven cucuteño que estudió ingeniería civil en la Universidad Francisco de Paula Santander, antes de ocupar el primer cargo del municipio, no tenía experiencia en cargos similares.

Es hijo del empresario y comerciante Víctor Roqueme, ‘El Indio’. El joven mandatario estuvo avalado por el partido Conservador y Cambio Radical, logrando un total de 23.060 votos que lo llevaron a convertirse en el mandatario municipal más joven de la región.

Diversas personalidades e instituciones rindieron homenaje póstumo al mandatario, quien falleció la tarde del martes en una clínica en Bucaramanga, donde tenía días hospitalizado.

FUE VALIENTE, SUPERÓ UN SECUESTRO

Víctor Julio Roqueme Quiñonez siempre mostró su capacidad de resiliencia y valentía ante las adversidades. A su corta edad, no solo le tocó luchar contra una penosa enfermedad, sino contra el flagelo del secuestro del que fue víctima a los 21 años.

El 28 de septiembre de 2017 fue secuestrado por sujetos armados, mientras transitaba por el Anillo vial Occidental, a la altura de la entrada de Carmen de Tonchalá, zona rural de Cúcuta.

Luego de 33 días, el 2 de noviembre, fue rescatado mediante un operativo conjunto entre el Gaula Militar y la Policía Nacional. En ese momento, las autoridades confirmaron que fue secuestrado por delincuencia común y solicitaban una millonaria suma de dinero por su liberación.

A sus 21 años fue víctima del secuestro en la zona rural de Cúcuta. Fue rescatado 33 días después en un operativo conjunto entre el Gaula Militar y la Policía Nacional.

Asimismo, las autoridades ofrecían una recompensa de hasta 50 millones de pesos, por información que dieran con su paradero.

Tras su rescate Roqueme, o ‘Junior’, como era conocido por llevar el mismo nombre de su padre; fue trasladado a la Brigada 30 del Ejército Nacional en donde se reencontró con sus familiares.

Su recibimiento fue en grande, luego de varias manifestaciones de solidaridad por parte de compañeros de estudios, amigos y la comunidad que con varias manifestaciones públicas exigían la liberación del joven, quien fue localizado en una zona alejada y en deplorables condiciones infrahumanas.

“Inicialmente los secuestradores se identificaron como agentes del CTI… me llevaron a una casa siempre con la cara tapada y me decían que si intentaba escaparme me iban a matar, comía muy poco y afortunadamente el trato fue bueno, pero es muy duro porque aguanté hambre y frío, durante unos días estaba muy mareado y no sé si era que me estaban dando algo para mantenerme calmado y quieto”, dijo el joven al momento de su liberación ante los medios de comunicación.