Meterse una botella en el ‘jopo’ causa daños graves en la salud
La extraña práctica sexual que experimentó un ciudadano de nacionalidad extranjera, al introducirse una botella de bebidas embriagantes en el ‘jopo’, en medio de actos sexuales que sostenía con su pareja sentimental, ha causado revuelo y todo tipo de comentario en la comunidad que reside y por estos días visita a la capital del Magdalena.
Tras conocer la información que traspasó las cuatro paredes del Hospital Julio Méndez Barreneche, centro asistencial donde llegó en busca de ayuda, expertos en salud se refirieron al tema e indicaron que introducirse objetos extraños a través del ano o el recto, puede desencadenar varias cosas, entre ellas el desgarro de los esfínteres del ano.
Enzo Gil Covilla, médico cirujano, indica que el esfínter interno que hace el control tiene una fibra que hace la difusión y estas se podrían romper, hasta el punto que la persona puede estar haciendo heces o expulsando gases y no darse cuenta, una incontinencia fecal.
“De acuerdo al tamaño y a la punta, la forma en que tenga el objeto y su firmeza puede perforar el recto y esa perforación puede quedar libre hacia la cavidad abdominal y la materia fecal contenida en el ano recto u en el recto sigmoidea que es un segmento del intestino antes de llegar al recto y este puede perforarse lo que podría generar que la materia fecal caiga en la cavidad abdominal y se puede producir una peritonitis fecal, que en un periodo de 24 a 48 horas puede ser fatal”, contó Enzo Gil Covilla, médico experto en este tipo de temas.
De acuerdo con la información suministrada por el cirujano, si el paciente consulta antes de 24 horas con médicos especialistas que abordan este tipo de casos difíciles, el afectado, simplemente bajo una anestesia es sometido a una dilatación anal y el objeto se le extrae.
“Si ya he existido perforación, entonces lo que ocurre es que, probablemente por ser un trauma, porque eso es un trauma, hay que entenderlo como tal y la gravedad de esto es que la materia fecal es altamente contaminante y en la cavidad peritoneal produce una peritonitis fecal y aquí ya es imposible después de 24 horas una sutura del intestino y el paciente se verá abocado a que el cirujano que asuma el caso haga lo que se llama colostomía derivativa, es decir, secciona el intestino por encima donde está la lesión y eso lo exterioriza a la pared abdominal para que el paciente evacue sus heces por ahí sin que eso sea un proceso voluntario de defecación”, manifestó Enzo Gil Covilla, médico cirujano.
EL HECHO
Como se dio a conocer en la edición impresa de ayer, un hombre de nacionalidad extranjera, se dice que es norteamericano y de aproximadamente 50 años, llegó a altas horas de la noche en los últimos días del mes de diciembre a la sala de urgencias del Hospital Julio Méndez Barreneche con un fuerte dolor que le impedía sentarse, pero avergonzado por la situación que vivía prefirió abandonar el centro asistencial.
Sin embargo, el dolor persistió y el afectado, de quien se desconoce su identidad, decidió volver al centro médico y esta vez confesó ante el personal de galenos de turno que tenía una botella de cerveza introducida en su recto, manifestando que su esposa se la introdujo para cumplirle su deseo sexual.
Por lo anterior, el ciudadano extranjero fue sometido a estudios radiológicos, con los que los médicos especialistas pudieron corroborar con la ubicación del elemento, el cual se encontraba entre recto y el sigmoide. El hombre fue pasado de inmediato al quirófano por el cirujano en turno.